Según el WEF, para el 2025, las tecnologías de industria 4.0 reemplazarán 85 millones de puestos de trabajo, pero crearán a la vez 97 millones de nuevos roles, que nacen de la nueva interacción entre personas, máquinas y algoritmos modernos. Los procesos productivos están cambiando en todo el mundo y las nuevas tecnologías se han convertido en una necesidad para reactivar la economía de países latinoamericanos creando oportunidades de crecimiento y empleabilidad. En este contexto, se origina una revolución del re-adiestramiento de la fuerza laboral con base sólida en el sistema educativo.